lunes, 8 de febrero de 2010

Recapitulando

Ya está de nuevo el blog de cumpleaños, coincidiendo (más o menos) con el año nuevo chino. Así que: ¡Feliz año del tigre!


Desde luego el 2009 no ha sido su año (perdón por el chiste malo), y tampoco el de Mal Papel, que ha ido de mal en peor en número de entradas. Ya ni sueño con reseñar todo lo que leo, a partir de ahora lo haré sólo con lo que más me llame la atención, o con relecturas, que este año tengo muchas ganas de releer, no sé, ya veré cómo me lo monto. Por ahora mencionaré algunas de mis lecturas del último año no reseñadas:

Sigo a vueltas con los clásicos, he dejado a los griegos para pasarme a los romanos: Roma de Simon Baker, la Eneida de Virgilio, un par de comedias de Plauto, y el enésimo fracaso con La muerte de Virgilio, de Hermann Broch. He comenzado a leer ese libro tres veces al menos, pero se me hace muy espeso... Ahora me espera Julio César y su guerra de las Galias...

Por lo demás, he cubierto el cupo de narradores actuales con Gomorra, un libro valiente, que muchos podrían haber escrito, pero sólo Roberto Saviano tuvo huevos para hacerlo. Y también cayeron, traducidos al gallego, los cuentos de O conductor de autobús que quería ser Deus, del israelí Etgar Keret en una buena edición de la pequeña editorial Rinoceronte, de Cangas.

Con intención de "preparar" un viaje a Marruecos me leí El cielo protector, de Paul Bowles. El viaje al final me falló, y el libro... bueno, un poco también, esperaba otra cosa... a la traducción se le nota el acento argentino de Aurora Bernárdez, la que fue mujer de Cortázar.

De ciencia ficción, Estación de tránsito, de Clifford D. Simack, un clásico de la Edad de Oro de la sci-fi, con su trasfondo de miedo a la bomba atómica y la guerra fría. A mí me dejó bastante frío también, la verdad. Aunque la historia engancha por momentos, Simack me pareció un escritor bastante mediocre.

Pero sin duda mi "mejor del año" se lo lleva la trilogía La lucha por la vida, de Pío Baroja, de la cual aún confío en escribiros algo próximamente. Y de los que sí he comentado, recuerdo con mucho agrado el Banquete y el Fedón de Platón, los Cuentos de Kafka y El mundo de Millás.

Los tebeos... Estoy dejando un poco de lado mi vena más gafapasta y europea, volviendo a leer cosas como la línea Vértigo, superhéroes, infantil… precisamente uno de los acontecimientos comiqueros del año en España ha sido la colección Clásicos del Humor, de RBA, que recuperó maravillosos tebeos antiguos de la editorial Bruguera: Anacleto, La familia Cebolleta, Sir Tim O’Theo… son algunos de los tomos que me compré para alimentar mi nostalgia... ah, y por otra parte el Topolino de Figueras y el Dr. Slump de Toriyama.

En cuanto a los superhéroes, que tenía muy abandonados, estoy completando la reedición de los Astonishing X-Men de Joss Whedon, que intenta recuperar el sabor de la época gloriosa de los mutantes... y no lo hace nada mal. También le tenía ganas a otro guionista de los que triunfan últimamente: Ed Brubaker, así que me hice con su Catwoman. Cumplidor, pero no "mata".

El que siempre da la talla es el gran Alan Moore. Este año me acabé el último tomo de Promethea, en mi opinión una de sus grandes obras, de la que espero hablaros por aquí. También me hice con algunas de sus obras antiguas que no tenía: la ciencia ficción de Future Shocks y sus historias para Superman.

Y hablando de Superman, estoy en plena "fiebre Grant Morrison", acabo de leer su All Star Superman, estoy completando (y disfrutando mucho) Los Invisibles, y además me compré su añejo y divertido Sebastian O. De Morrison también espero hablaros bastante este año. Y de Frank Miller, un autor que nunca me cayó simpático, pero al que le estoy dando nuevas oportunidades. Sobre todo le tenía ganas a su polémico DK2, y lo cierto es que me ha gustado.

Más tebeos: Profesor Bell y El gato del rabino, del siempre interesante Sfar; Las célticas de Hugo Pratt; Modotti de Ángel de la Calle, un gran biopic con el autor implicándose hasta las trancas; Ici Meme, el mejor trabajo como dibujante que he visto de Tardi...

Decepciones: Breakdowns, de Spiegelman, no es tan genial e innovador como él cree, me parece; Billy Avellanas, no acabo de encontrarle la gracia a Tony Millionaire, la verdad...; Las 3 paradojas, de Hornschemeier: pretencioso, aburrido... insufrible.

El 2009 ha sido un gran año para los cómics: han salido definitivamente del ghetto, y se han publicado grandes obras. Ya he mencionado el All Star Superman, y además he disfrutado con el George Sprott de Seth, el Génesis de Crumb, y la parte que he leído del Acme de Chris Ware... Y podría seguir con más lecturas, pero creo que ya os he cansado bastante (si es que habéis llegado hasta aquí).

... y así, queda inaugurado el cuarto año de Mal Papel. ¡Nos leemos!