miércoles, 31 de octubre de 2007

Science fiction / Double feature

Si, como decía hace unos meses, me emociono con la escena final de La Vida de Brian y su pegadiza canción, de la mítica The Rocky Horror Picture Show me quedo con los títulos de crédito iniciales, y otra gran canción: Science Fiction/Double Feature, cantada por el padre de la criatura, Richard O’Brien.


Por supuesto, toda la película vale la pena, y sus fans son legión en todo el mundo, tanto de la peli como de la obra teatral de que proviene, y de la que os enlazo una versión en vivo. Ahora, los subtítulos:



... y aquí, mi torpe traducción:

Michael Rennie estaba enfermo El día que la Tierrra se paralizó
Pero nos dijo dónde permanecer.
Y Flash Gordon estaba allí en ropa interior plateada
Claude Rains era El Hombre Invisible.

Entonces algo se torció para Fay Wray y King Kong
Quedaron presos en mermelada de celuloide.
Y con cadencia mortal Vinieron de otro mundo
Y así fue cómo se difundió el mensaje.

Ciencia Ficción (uuh uuh uuh) en sesión doble
El Doctor X (uuh uuh uuh) fabricará una criatura
Mira los androides luchando (uuh uuh uuh) con Brad y Janet
Anne Francis protagoniza (uuh uuh uuh) Planeta Prohibido
Wo oh oh oh oh oh
En el último pase de la sesión doble de cine.

Supe que Leo G. Carroll estaba en peligro
Cuando la Tarántula subió hacia las colinas
Y me puse realmente caliente cuando vi a Jeannette Scott
combatir a un trífido que escupe veneno y mata.

Dana Andrews dijo que los mentecatos le habían dado las runas
y pasándolas usó un montón de habilidades
Pero Cuando los mundos choquen, dijo George Pal a su novia
Voy a provocarte terribles emociones
Como…

Ciencia Ficción (uuh uuh uuh) en sesión doble
El Doctor X (uuh uuh uuh) fabricará una criatura
Mira los androides luchando (uuh uuh uuh) con Brad y Janet
Anne Francis protagoniza (uuh uuh uuh) Planeta Prohibido
Wo oh oh oh oh oh
En el último pase de la sesión doble de cine
Quiero ir – Ho oh oh oh
En el último pase de la sesión doble de cine
By R.K.O. - Wo oh oh oh
En el último pase de la sesión doble de cine
En la última fila – Ho oh oh oh oh

En el último pase de la sesión doble de cine


martes, 30 de octubre de 2007

Barrio lejano

En este manga, Jiro Taniguchi vuelve a los mismos temas de El almanaque de mi padre: la infancia en los años sesenta (la misma que vivió Taniguchi, y en el mismo pueblo: Tottori), las barreras generacionales, la familia…

Hiroshi, un hombre de negocios de 48 años, se ve misteriosamente devuelto al pasado, a sus catorce años de 1963, pero con sus recuerdos y experiencias de madurez; un viejo sueño que todos hemos tenido alguna vez (y que hemos visto, por ejemplo, en Peggy Sue se casó, de Coppola). Hiroshi se da cuenta que fue por esa misma época cuando su padre les había abandonado, un hecho que conmocionó a toda su familia; así que decide aprovechar esta nueva oportunidad para descubrir las razones que llevaron a su padre a tomar esa decisión, y si puede, impedirlo. Pero al mismo tiempo se aprovecha de su situación, dejándose llevar por su “nueva” vida: saca mejores notas, destaca en los deportes, se liga a la “guapa oficial” del instituto… olvidándose poco a poco de su vida adulta.

El almanaque de mi padre me gustó bastante, pero he disfrutado mucho más con Barrio lejano. Su ritmo es más ágil, y Taniguchi logra involucrar más al lector en la historia, aumentando la tensión a medida que se acerca el día en que el padre se marcha. Por lo demás, este autor vuelve a demostrar su maestría con la expresión facial, los silencios, la creación de ambientes y la dosificación de las emociones. Entre otras cosas.

viernes, 26 de octubre de 2007

Brujería, estructura social y simbolismo en Galicia

Como advierte la contraportada, éste no es un libro frívolo sobre brujería, sino una exhaustiva investigación antropológica de Carmelo Lisón Tolosana, que desde 1964 hasta 1976 (más intensamente los primeros años), recorrió toda Galicia con su magnetófono recopilando las experiencias de los vecinos de incontables aldeas en relación a este tema.

Tras una introducción histórica (casos de brujería en Galicia juzgados por la Inquisición) y otra antropológica, el grueso del libro se divide en el estudio de tres aspectos de la bruja: la bruxa, la sabia, y la meiga, siendo esta última acepción la que recoge el sentido negativo de la palabra: bruja como causante de daños, mal de ojo, etc., aunque el propio Lisón Tolosana advierte que estas palabras pueden usarse de forma indistinta según los lugares o las gentes que la empleen.

Algunas de las causas del fenómeno las encuentra el autor en la distribución geográfica de la población, diseminada en pequeñas aldeas mal comunicadas, a las cuales el médico podía tardar días en llegar. No es de extrañar que los vecinos aquejados de un mal recurriesen a la medicina tradicional de las brujas.

Otro factor importante fue la sempiterna emigración: gente que volvía de América con conocimientos “mágicos” de adivinación, cartomancia… que ponían al servicio de la comunidad para ganarse la vida, ya que a su regreso se les veía como extraños, lo cual dificultaba su integración pero añadía credibilidad y “exotismo” a sus ritos.

Pero sin duda el factor fundamental es la envidia entre vecinos, y la necesidad de un chivo expiatorio (un concepto fascinante) al que culpar de las enfermedades, de las malas cosechas, de los desengaños amorosos… así que, además de "haberlas haylas", "si no existieran, tendríamos que inventarlas"...


miércoles, 24 de octubre de 2007

Éramos tan jóvenes (3)

Aquí vengo con más series de las que emitía la gallega en los ochenta.

A falta de versión gallega, he encontrado Carteiro Pat en portugués; para ellos es Carteiro Paulo, pero ¿alguien entiende cómo demonios le han puesto al gato?


Esta otra serie tenía personajes de estética muy similar y otra canción pegadiza: Berta, amada Beeerta, o meu querido robooot…


Y por último… Gargalladas de Horror. Lo que era un horror, pero divertidísimo, era el doblaje al gallego de estos dibujos… he conseguido una versión en castellano, aunque sé que no es lo mismo.

lunes, 22 de octubre de 2007

Lo mejor que le puede pasar a un cruasán

Pablo Tusset logró en 2001 convertir su primera novela en un best-seller, que un año después fue adaptada al cine y protagonizada por Pablo Carbonell.

El protagonista de la obra es otro Pablo, Pablo Miralles, al que me fue inevitable ponerle la cara del escritor (en la edición que leí, de Círculo, hay una foto suya en la contraportada). También conocido como Baloo, es la oveja negra de su burguesa familia: gordo, aficionado a las drogas, vago, putero… pero cuando su hermano -todo lo opuesto a él- desaparece, Pablo se lanza a investigar, y sus pesquisas le llevan a recorrer, entre porros y vichoff (vodka con agua de Vichy), una Barcelona de clubs muy privados, extraños restaurantes y casas misteriosas.

La trama policíaca es una excusa para analizar la personalidad de Pablo Miralles, un personaje que recuerda mucho al inolvidable Ignatius Reilly. Vicioso, pero con inquietudes intelectuales, aficionado a Internet (parece ser que Tusset trabaja, o trabajaba, como informático), prepotente y espíritu libre, aunque dependa económicamente de su familia.

El libro cumple su función de entretener y su lectura es amena, pero tiene altibajos, y me ha parecido una novela hecha con intención de gustar. Lo cual no tiene nada de malo, mientras no se note, y aquí se nota que el autor quiere “quedar bien”, difundir algunas de sus propias ideas y facturar un producto de éxito. Objetivo conseguido, pero…

viernes, 19 de octubre de 2007

Sherlock Time

Algún día hablaré más extensamente de mi admiración por la cultura argentina del siglo XX, en especial su literatura… y sus tebeos, claro. En Sherlock Time se unieron por primera vez el más grande guionista y el más importante dibujante argentinos del pasado siglo: Héctor Germán Oesterheld y Alberto Breccia, que publicaron estas páginas entre 1958 y 1959, cuando ambos artistas rondaban los cuarenta años y estaban en plena forma.

Sherlock Time
fue un campo de pruebas para su gran obra conjunta posterior, Mort Cinder (1962). Como en ésta, los protagonistas son el misterioso investigador de lo oculto (Sherlock), y su “ayudante”, el jubilado Julio Luna, que ejerce de Watson como narrador de las historias. Roles que en Mort Cinder desempeñarán el propio Mort y su “Watson” particular, el anticuario Ezra Winston. Hay otras conexiones entre ambas obras: la trama de la segunda historia, El Ídolo, por ejemplo, donde además aparece un personaje, también anticuario, que anticipa a Ezra, a quien Breccia dibujaba con su propia cara “de viejo”, así como Julio Luna tiene la cara del Breccia cuarentón.

Aunque los argumentos son los habituales de la ciencia ficción de la época, ya bastante trillados en Estados Unidos por el cine, novelas pulp, cómics… el mérito de Oesterheld consiste en apropiárselos para el lector argentino: los personajes viven en Buenos Aires, leen a Groussac, toman mate… Si queréis saber más de éste genial guionista, justo esta semana se celebra en la web Zona Negativa la Semana Oesterheld, por coincidir con el 30 aniversario de su dramática “desaparición” a manos de la dictadura argentina.

En cuanto a Breccia, estaba convirtiéndose ya en el genio que fue. Aunque mejoraría mucho en el futuro (Mort Cinder, Buscavidas, Drácula…) y él mismo acabó diciendo que no estaba contento con éste trabajo, empieza a arriesgar cada vez más en sus viñetas y tiene la audacia del que sabe que está muy cerca de dominar su oficio. Alejándose de la influencia de Caniff, su técnica es cada vez más expresionista. Su dominio del blanco y negro es impresionante ya desde la primera historia, La Gota, un opresivo cuento a lo Edgar Allan Poe, lleno de sombras.


martes, 16 de octubre de 2007

Fotos hechas por teléfono (3)

Charco (homenaje a Escher)

Feria 1

Feria 2

Músicos

sábado, 13 de octubre de 2007

Locas #2

Vaya si mejora este segundo tomo con respecto al primero: las aventuras de ciencia ficción, dinosaurios y superhéroes dejan paso a historias más cotidianas de pasiones, celos, cuernos y punk-rock, en las que la serie da un salto de calidad impresionante.

Los personajes ganan en profundidad y las historias se entrelazan, pero como eje narrativo permanece siempre la historia de amor-amistad entre Hopey y Maggie, desarrollada de forma magistral, con una sensibilidad que nunca cae en la ñoñería (algo muy difícil a mi juicio, que pocos narradores consiguen).

Si comentando el primer tomo decía que nadie como los hermanos Hernández había tratado mejor la personalidad femenina en un cómic, ahora me atrevería a afirmar que en Locas está el mejor retrato que se ha dado en un tebeo (que yo haya leído) de lo que llamamos “ser joven”, junto a otro monumento: Agujero Negro, de Charles Burns.

Y siguiendo con las (odiosas, lo sé) comparaciones, esas relaciones entre chicas de Locas me han recordado bastante a las de las protagonistas de Ghost World, de Daniel Clowes, y a Promethea y su amiga Stacia, en el Promethea de Alan Moore. Y mira que me gustan Moore y Clowes, pero al menos en este aspecto la ventaja es para Hernández, por haber conseguido más frescura en las relaciones entre sus personajes. O será que tengo su lectura más reciente, no sé; si comento esto es para destacar la tremenda influencia de Love & Rockets en obras posteriores.

El dibujo es tema aparte: precioso. Jaime Hernández es un auténtico maestro del blanco y negro que ha logrado un equilibrio perfecto entre clasicismo y modernidad. Ahí queda eso (de momento).


viernes, 12 de octubre de 2007

Éramos tan jóvenes (2)

Segunda entrega del nostálgico recorrido por la TVG de mi infancia:

La mítica cabecera de Tarzán:

Este é un traballo para… ¡Superman!

Y con éste vais a flipar, si os acordáis; atentos a la música: ¡King Kong!

martes, 9 de octubre de 2007

Caos y Orden

De la infinidad de fenómenos que pasan en torno a mí, aíslo uno. Elijo, por ejemplo, un cenicero sobre mi mesa (el resto desaparece en la sombra).

Si esta percepción se justifica (por ejemplo, he señalado el cenicero porque debo tirar la ceniza de mi cigarrillo) todo es perfecto.

Si he elegido el cenicero por azar y no vuelvo después a advertirlo, también todo va bien.

Pero si, después de haber destacado ese fenómeno sin objeto preciso, vuelve usted a él, ahí está lo grave. ¿Por qué ha vuelto usted, si aquél carece de importancia? ¡Ah, ah!, ¿así que significa algo para usted, ya que vuelve a él? He aquí como, por el simple hecho de concentrarse sin razón alguna un segundo de más en ese fenómeno, la cosa comienza a ser diferente del resto, a cargarse de sentido…

-¡No, no! (se defiende usted), es sólo un cenicero ordinario.

-¿Ordinario? ¿Entonces por qué defenderse, si es en verdad un cenicero ordinario?

He aquí cómo un fenómeno se convierte en una obsesión…

¿Será que la realidad es, en esencia, obsesiva? Dado que nosotros construimos nuestros mundos por asociación de fenómenos, no me sorprendería que en el principio de los tiempos haya habido una asociación gratuita y repetida que fijara una dirección dentro del caos, instaurando un orden.

Hay algo en la conciencia que se convierte en trampa de ella misma.


Witold Gombrowicz, Cosmos

lunes, 8 de octubre de 2007

Cosmos

Novela de Witold Gombrowicz (1904-1969), un polaco que bebe de la tradición vanguardista y de la novela psicológica, y que ha influido mucho a escritores en español debido a su largo exilio en Argentina. Le tenía ganas a este autor, así que no me lo pensé mucho cuando encontré de saldo esta edición en tapa dura y traducida por Sergio Pitol por tan sólo 1,80 miserables euros.

El hallazgo de un gorrión colgado de una rama desencadena una serie de hechos en apariencia triviales, pero que en la mente del protagonista-narrador se convierten en obsesión, y le empujan a participar en extraños juegos de correspondencias, cada vez más inquietantes.

Aunque el propio autor define a su novela como “policíaca”, la etiqueta se le queda muy corta. Por un lado, disecciona la vida de una casa de huéspedes burguesa, cuyos habitantes y sus patéticas vidas quedan expuestas sin piedad: las relaciones humanas, muchas veces crueles, y esas máscaras que nos vestimos cada mañana y nos ocultan de los demás.

Por otra parte, el protagonista se esfuerza por dar forma al caos de la realidad en su cabeza, llegando a conclusiones absurdas en su mayoría, pero que no dejan de tener una cierta lógica: esa lógica que nos lleva a contar las baldosas de la pared, o a ver la cara de la Virgen en una mancha de humedad. Así de raros somos, y así nos lo cuenta este libro.

sábado, 6 de octubre de 2007

Éramos tan jóvenes (1)

Un comentario en (la) otra entrada sobre este tema y el conmovedor repaso nostálgico que se ha marcado recientemente La Vida en Viñetas me han impulsado a inaugurar la sección de videos y a recordar de nuevo la TVG de los comienzos. Por si algo no va bien, dejo además de los videos los enlaces al youtube, si los seguís podréis encontrar otros fragmentos de las mismas series.

Claro que lo ideal sería poder verlas con su doblaje al gallego (¡Vóalle os miolos!), a ver si alguien en la telegaita lee esto y se anima a reponer material antiguo.

Vamos allá, empezamos suavecito: Manimal convirtiéndose en pantera.


A Muller Biónica. Bueno, en este caso, La Mujer Biónica:


Y uno de mis favoritos: Os dos Contiños.

lunes, 1 de octubre de 2007

¿Pentagonal o redondo?

Un clásico moderno, el mechero Clipper, ha cambiado su diseño, al parecer por razones de seguridad, para que a los niños les sea más difícil encenderlo. Lo cierto es que la rueda redonda era más cómoda, pero todo sea por la infancia…


Buscando información, he encontrado una página muy completa sobre los ya extinguidos clipper regulables.

Y aquí, el modelo trapichero, con doble fondo.